Resulta que no es que Mario recoja monedas en sus juegos porque éstas sean un elemento básico del Reino Champiñón o porque haya innumerables tiendas en las que gastarlas… según declaró el propio Miyamoto (creador del juego), iban a ser frutas lo que Mario recogiese, pero quisieron que fuera algo que atrajese lo más posible al jugador, y pensaron en la avaricia innata que sin duda compartirían la mayoría de los usuarios, por lo que brillantes y sonoras monedas serían el obsequio perfecto al que el jugador no fuese capaz de resistirse, y se lanzase a ellas con avidez:
“Cuando pensábamos en algo que a cualquier persona le llamara la atención y diga “Definitivamente quiero eso”, llegamos a la conclusión: “Sí, debería ser dinero…”- Shigeru Miyamoto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario